Se cumple un año desde que puse en marcha mi caja de resistencia para defenderme en los tribunales del acoso de la extrema derecha.
En solo seis días, entre el 3 y el 8 de julio de 2024, recaudé 51.056 euros aportados por 1.665 donantes. Más del doble del objetivo que me había planteado inicialmente en 80 días, motivo por el que cerré la campaña de donaciones y no he aceptado ni un euro más de las muchas personas —maravillosas personas— que se han ofrecido a ayudarme hasta el día de hoy.
Tras descontar los 3.705,87 euros de la comisión que se quedó Goteo (Fundación Platoniq) por su gestión, los 1.179,85 euros de comisiones que pagó esta plataforma por cada transferencia de tarjeta y PayPal más los 8.662,31 euros que aboné de impuesto de donaciones a la Agencia Tributaria de Andalucía, el saldo de partida de la caja de resistencia quedó en 37.540,61 euros (aquí se incluían los 43,64 euros de intereses que se generaron en las primeras semanas).
A lo largo de estos primeros doce meses he tenido que recurrir a la caja de resistencia en cinco ocasiones para abonar 8.999,22 euros a abogados y procuradores. Gastos de los que he ido informando a través de mi web rubensanchez.tw/transparencia. Dependiendo de los casos, los profesionales que me representan y defienden me cobran parte o la totalidad de sus honorarios antes, durante o tras finalizar el procedimiento.
De todos estos gastos he informado y aportado justificantes y facturas puntualmente a los tres periodistas que aceptaron mi petición de auditar la cuenta bancaria de mi caja de resistencia: el maestro Pepe Fernández, la directora de El Correo de Andalucía, Isabel Morillo, y la delegada de El País en Andalucía, Eva Saiz.
Cinco sentencias, cinco victorias
En el último año he ganado todas las sentencias que se han dictado en los procedimientos en los que estaba inmerso. Han sido cinco y con ellas sumo ya 28 ganadas a la ultraderecha, junto a otras siete perdidas, en todas las cuáles era yo el demandante o denunciante. Ni el PP de Andalucía ni Manos Limpias ni ninguno de los 13 ultras que me han llevado a los tribunales pueden decir que han logrado una sola sentencia en la que yo esté condenado.
Tres de estas cinco nuevas sentencias del último año se han producido en causas civiles por derecho al honor donde los contrarios han sido condenados en costas. Y otras dos en una causa penal por calumnias donde yo era el querellado y, como es habitual en este tipo de procedimientos, pese a mi absolución no condenaron en costas a quien me puso la querella.
La causa penal por calumnias ha sido frente a la hija mayor y socia del exjefe de Vox en Andalucía, Francisco Serrano. Me absolvieron, recurrió y la Audiencia Provincial de Sevilla ratificó la sentencia. Pedía que me condenaran a dos años de cárcel y que la indemnizara con 15.000 euros.
Las causas civiles han sido dos. En una soy el demandante, contra Raúl Alfonso Paredes (alias Un murciano encabronao), condenado en primera instancia y con la sentencia ratificada íntegramente por la Audiencia de Sevilla tras su recurso a indemnizarme con 30.000 euros por inventar que soy cocainómano y que utilizo dinero de las subvenciones que recibe FACUA para comprar droga.
En la otra causa por derecho al honor soy el demandado y estoy a la espera de la decisión de la Audiencia de Madrid sobre el recurso presentado por los demandantes, Isaac Parejo (Infovlogger), Sergio C. Martínez y Mario Camps (Los Meconios). Me reclaman 9.000 euros por el contenido del tuit que publiqué tras su actuación en un acto de Vox donde cantaron "Vamos a volver al 36".
A día de hoy, en la caja de resistencia hay 29.224,97 euros. Durante este año ha generado 727,22 euros de intereses.
Tal y como anuncié cuando puse en marcha el crowdfunding, en las causas donde logre condenas en costas retornaré las cantidades a la caja de residencia en cuanto los contrarios me las abonen. Así que confío en que la mayoría del dinero que he tenido que utilizar hasta ahora volverá a la caja.
Nueve nuevas acciones judiciales
Contar con la caja de resistencia me ha permitido hacer algo a lo que durante años tuve que renunciar en numerosas ocasiones. Emprender un importante número de acciones judiciales contra ultras que me insultan y lanzan bulos difamatorios sobre mí. El temor a perder y ser condenado en costas hizo durante mucho tiempo que fuese extraordinariamente selectivo a la hora de decidir las causas que abrir.
En estos doce meses he interpuesto nueve nuevas demandas por intromisión ilegítima en mi derecho al honor. Tres de ellas contra Raúl Alfonso Paredes, una contra Cristina Seguí, una contra Ernesto Martí Wetzel, una contra el abogado Pablo Franco, una contra el procurador José María Gragera Murillo, una contra Vito Zoppellari Quiles y otra contra el jefe de Desokupa, Daniel Esteve.
Durante este año no he recibido notificación de ningún juzgado comunicándome la interposición de alguna demanda o querella contra mí.
En la actualidad tengo 21 procedimientos judiciales abiertos. Tres penales impulsados por mí, trece civiles donde soy el demandante y otros cinco en los que soy el demandado.
Una vez más, te doy las GRACIAS por haberme apoyado económicamente, al igual que también quiero mostrar mi agradecimiento a la buena gente que me apoya con sus mensajes de aliento y llena de fuerzas para enfrentarme en los tribunales a la ultraderecha.
Estas son las cinco sentencias que me han notificado desde que puse en marcha la caja de resistencia:
17 de julio de 2024. Sentencia del Juzgado de Primera Instancia número 3 de Sevilla. Admite íntegramente mi demanda por intromisión ilegítima en el derecho al honor contra Raúl Alfonso Paredes, conocido como Un murciano encabronao, por haber afirmado en sus redes sociales que soy cocainómano hasta 35 veces a lo largo de casi un año. Lo condena a indemnizarme con 30 000 euros, publicar el fallo en sus canales en YouTube, iVoox, Facebook y Patreon, eliminar los contenidos injuriosos y pagar las costas procesales.
4 de septiembre de 2024. Sentencia del Juzgado de lo Penal número 11 de Sevilla, Me absuelve del delito de calumnias del que me acusaba la hija mayor y socia de Francisco Serrano, que solicitaba una pena de 2 años de prisión y una indemnización de 15 000 euros.
30 de enero de 2025. Sentencia del Juzgado de Primera Instancia número 69 de Madrid. Desestima la demanda interpuesta contra mí por Isaac Parejo (InfoVlogger), Sergio C. Martínez y Mario Camps (Los Meconios) en la que me reclamaban 9 000 euros por intromisión ilegítima en el derecho al honor y los condena a pagar las costas.
31 de marzo de 2025. Sentencia de la Sección 7ª de la Audiencia Provincial de Sevilla. Desestima el recurso de la hija mayor y socia de Francisco Serrano contra la sentencia de 4 de septiembre de 2024.
12 de junio de 2025. Sentencia de la Sección 6ª de la Audiencia Provincial de Sevilla. Desestima el recurso de Raúl Alfonso Paredes contra la sentencia de 17 de julio de 2024.
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